jueves, 22 de octubre de 2009

Cómo masajear a tu pareja

El primer consejo es que el ambiente debe ser agradable, ya que en un ambiente no agradable todo se arruinará, así que escoge muy bien el sitio। El masaje puede ser muy importante a la hora de mostrarle afecto a tu pareja, este puede transmitirle sentimientos, pero para que tu pareja disfrute al máximo del masaje y de sus múltiples beneficios, hay algunos conocimientos básicos que se debe conocer:
Debe ser agradable: Se debe evitar movimientos bruscos o dolorosos।

Debes concentrarte en el masaje y estar atento a las sensaciones que tu pareja experimenta. Esto te indicara si lo estás haciendo bien.
El ritmo es muy importante: Los movimientos originan ondas que se propagarán por todo el cuerpo, procura movimientos rítmicos y no pases bruscamente de una zona del cuerpo a otra.
La técnica de masaje podrá ser estimulante o relajante, todo dependerá del modo de aplicarla. Utiliza las palmas de las manos, las yemas de los dedos para estas técnicas
Un masaje fuerte y brusco es vigorizante; mientras que uno lento y regular, puede relajar y calmar.
El masaje debe ser suave sobre las zonas óseas, evitando presionar sobre la espina dorsal y sobre la parrilla costal, nunca haga percusiones sobre la zona abdominal, puede ser peligroso, el masaje más fuerte o vigoroso se aplica sobre la musculatura। Sin embargo tratándose de un masaje estimulante lo haremos también suave para lograr que nuestra pareja lo disfrute al máximo.

No se puede dar el masaje con las manos secas, directamente sobre la piel, aplique aceite vegetal, el de almendras es excelente para este fin, puedes agregarle unas gotas aromatizantes para agregar sensaciones।

Evite las uñas largas, si las tienen ponga mucho cuidado en no lastimar a su pareja, quítese el reloj, anillos, pulseras, etc. para no dañar a su pareja o producirle alguna sensación desagradable.
La música relajante de fondo beneficia la relajación y el bienestar.

Visita nuestra página web
www.paisasin.com
Deja tus comentarios

miércoles, 14 de octubre de 2009

Conocer los Gustos de tu Pareja

Al comienzo de una relación es muy importante el dialogo de este dependen indicadores que nos guiarán sobre la mejor manera de complacer a nuestra pareja। Es muy importante estar atento ante señales no verbales que nos darán una mayor claridad sobre sus preferencias.

Debemos tener presente que la mejor forma de saber si ella se siente cómoda con algo nuevo es preguntárselo directamente। Las parejas que se comunican abiertamente tienen mejores relaciones en el sexo।

Sin embargo a todos no nos resulta tan fácil hablar de sexo con nuestra pareja, por lo que es importante saber interpretar las señales no verbales que las mujeres ofrecen ante nuestros intentos de innovación। He aquí una lista con algunas indicaciones:

La dominación es una fantasía material para ambos sexos, aunque, a veces, la concreción de esta fantasía puede ser menos placentera de lo imaginado.
Por eso, será importante saber si ella se siente cómoda en la sumisión. En este sentido, podrás darte cuenta si está dispuesta a hacer algo analizando su actitud sexual general si bien éste no es el único indicador y siempre pueden presentarse excepciones a la regla.
Si ella es una amante creativa e interesada, posiblemente quiera intentarlo। Ése será nuestro primer pensamiento.

En cualquier caso, es posible que ella se muestre evasiva ante la dominación, así que prueba sosteniendo sus brazos por debajo de su cabeza mientras le haces cosas lindas con tu boca.
Si ella intenta zafarse o parece incómoda, entonces detente। Mírala, observa su cara, y presta atención a su reacción. Debes estar listo para liberarla si ella te lo pide.

Cualquier cosa que te pase por la cabeza antes tendrás que consultarlo con tu pareja, el sexo es de ambos, fantasías, fetiches, etc., no te prives de conocer las preferencias de tu pareja, esto solidificará la relación, pues es un signo de mutua confianza, por otro lado olvídate de imponer cosas que a ella no le gusten. Por otra parte, podría pasar que ella tenga la mente abierta y te haga sentir cómodo desde un primer momento, permitiéndote expresarte tranquilamente. En cualquier caso, aborda el tema con respeto y, posiblemente, ella también lo haga.

Sexo oral
Aunque esto parezca un poco anticuado, hay algunas mujeres que no están familiarizadas con una de las actividades favoritas de muchos hombres: “el buceo por las profundidades”।

Esto puede darse por una variedad de razones, aunque, por lo general, suelen sentirse incómodas o intimidadas ante el hecho de que el hombre pueda olerlas y saborearlas en una forma tan íntima।

Si ella se resiste a tu descenso cerrando sus piernas, deberás reconsiderar। En una de esas, ella tiene una muy buena razón para no querer que estés ahí olores y sabores desagradables y bien podría estar haciéndolo por ti.

Sin embargo, podría ocurrir que no esté familiarizada con los deleites sensuales del sexo oral, por lo que tendrías que hacer una introducción larga y cálida antes de zambullirte।

Normalmente, si se siente incómoda, ella se pondrá tensa y se enroscará, y pasará a la siguiente fase de la relación sexual esperando que no vuelvas a intentarlo।

Si sientes su incomodidad, este aspecto de tu vida sexual requerirá de algunas pláticas en etapas más avanzadas de la relación, preferiblemente cuando no se encuentren en una situación दे intimidad.

Por otra parte, si desciendes a sus zonas bajas y ella te lo permite, tendrás luz verde.

Sexo durante el período
Cuando recién inicias una relación con una mujer, ella podría no saber cómo manejar el tema del período. En esta situación, la gran pregunta es: “¿tienes sexo durante el período?”
Ella no sabe cuán confortable estarás con la menstruación y los asuntos que ésta conlleva, así que siéntete libre de hablar con tu pareja sobre el tema।

Sentirte cómodo con su período te dará algunos puntos a favor, así que intenta conversar con ella e informarte; formula preguntas, escucha y aprende। Podrías descubrir algunas cosas importantes desconocidas acerca de este asunto.

Algunos sujetos no sienten felicidad al ensuciarse, mientras que algunas mujeres tampoco están a gusto। Sin embargo, la mayoría no tendrá mayores problemas mientras tú no los tengas.

Antes que nada, pregúntale, y si ella dice que no, no lo hagas. Ten en cuenta que esto no quiere decir “nunca”, sino “no por ahora” al menos, desde luego, que ella se encargue de dejarlo bien en claro.
En consecuencia, siéntete libre para preguntarle nuevamente en otra ocasión। Aquí va un consejo útil para estas situaciones delicadas: con frecuencia, durante sus períodos, las mujeres suelen estar más excitadas que de costumbre, dado que los niveles altos de estrógeno las hacen extra-sensitivas.

Por lo tanto, si consigues calentarla lo suficiente, es poco posible que pueda resistirse। Habiendo dicho esto, debemos también saber que son muchas las razones por las que ellas no querrían tener sexo durante el período, tales como olores, posibles desastres con las sábanas, suciedad, dolores, y otros.

Elije con precisión el momento de intentarlo y la luz roja podría volverse verde por ejemplo, inmediatamente después de un baño।

Si a ella no le importa y a ti tampoco, entonces háganlo, aunque siempre usando en sentido común. En cualquier caso, el sexo durante el período no es recomendable durante los albores de una relación, ya que requiere de un alto grado de confianza y comodidad entre las partes de la pareja.

viernes, 9 de octubre de 2009

Los Errores de las Mujeres en la Cama


En esta oportunidad son ellos los que se quejan del comportamiento femenino bajo las sábanas y aunque muchos reclamos parecen caprichosos, la idea es tenerlos en cuenta para ver si estos son ciertos o son puras exageraciones.

Según una encuesta realizada en Internet por una revista femenina española, los hombres están muy insatisfechos con la actitud de sus parejas en la cama. Todos los encuestados han coincidido en las características claves que las mujeres no deberían hacer a la hora del amor.

Detallamos algunas de ellas para que cada una juzgue si la visión masculina es exagerada o si por el contrario reflejan la realidad:

Hacerse rogar. Todos explican que ya están cansados de pedir sexo como si fuera un favor que deben hacerle sus compañeras.
Esperar a que el hombre lo haga todo adoptando una conducta sexual pasiva.
Sin duda, una de los comportamientos que más los afecta es la falta de iniciativa.
Hacer daño con los dientes durante una felación.
Planificar a qué hora y qué día se debe producir el encuentro íntimo. Tanta organización los agobia.
Hacerlo con la luz apagada. A los hombres nos gusta verlas desnudas.
Negarse a practicar el sexo anal y hacerles ver que son unos pervertidos.
Las clásicas mentiras como “hoy me duele la cabeza”.
No colocarle nunca el preservativo como si solamente su uso fuera responsabilidad de él.
Querer hablar por hablar después del acto sexual.
El excesivo pudor o creer que sólo las prostitutas pueden hacer lo que ellos quieren o ellas desean, pero no se animan a decirlo.
No estar depiladas. No exigen el exceso, pero la prolijidad e higiene es importante.
Desmaquillarse antes de hacer el amor. Parecería que se hubiesen puesto bellas para otra persona.
Excitarlos para luego no hacer nada. Ese juego puede acabar con la atracción entre la pareja, ningún hombre le gusta quedar empezado.
No usar lencería erótica.

Salvando las distancias entre los sexos, el hecho de que ambos se entiendan en el plano emocional y sexual es la conjunción perfecta de la pareja ideal. Y no es tan distinto de lo que esperan ellas de un hombre en la cama: espontaneidad, ternura, sorpresa, cumplir fantasías y sobre todo, lograr que ambos disfruten porque lo que más valoran es una mujer que no se intimide y que reconozca que le gusta tanto el sexo como a ellos.

“La mujer tiene tendencia a ocultar su interés sexual. Si es capaz de asumir su necesidad y gusto como algo natural será algo fabuloso para el hombre porque de lo que más se quejan es de la falta de iniciativa y de los pudores a la hora del coito”, explica la sexóloga argentina Sandra Andrade.

Lo cierto es que las mujeres no tienen pudores por que sí. Hay razones que pueden explicar determinadas formas de ser. “Todas las mujeres tenemos complejos físicos, pero éstos se hallan en la cabeza y no en el cuerpo. El hombre tiene que colaborar para que su pareja se sienta segura en la cama.

La gordura, la celulitis, los pechos muy grandes o muy pequeños, un trasero muy amplio o caído, todas estas sensaciones, que pueden ser falsas en realidad limitan mucho la autoestima y lo que una mujer quiera hacer a la hora del sexo.
Muchas confiesan que les gustaría ser más osadas e intentar realizar las fantasías que sus compañeros proponen, pero a la hora de la verdad cuesta mucho materializarlas.
Es un trabajo de dos y el hombre tiene mucho que ver para que la mujer solucione uno de los problemas que más le molesta a ellos, el de la falta de iniciativa o el pudor que lleva a la rutina sexual”, comenta la especialista.

Los reclamos expuestos no solamente incluyen a las mujeres. Los hombres están involucrados en estos defectos y la única manera de corregirlos es, sin dudas, de los dos.

lunes, 5 de octubre de 2009

Ejercicios para mejorar los orgasmos

Conocidos por el nombre de su desarrollador, el doctor Kegel, estos ejercicios están destinados a tonificar y fortalecer el músculo pubocoxígeo (músculo PC). Al hacer estos ejercicios estaras abonando ganancias sustanciales al mejoramiento de tu vida intima, será cada vez más placentero estar con tu pareja y retardaras los efectos de los años sobre nuestras relaciones de pareja.

En ambos géneros puede encontrarse este músculo, y en las mujeres sostiene los siguientes músculos: uretra, vejiga, vagina, útero, y recto; y en los hombres: uretra, vejiga, pene, y recto.

Dado que el músculo pubocoxígeo interviene en el orgasmo y en la eyaculación, estos ejercicios, hechos en forma regular, pueden ayudar a corregir impotencia y problemas urinarios.

Cualquier persona puede aprender, usar, y hacer los ejercicios de Kegel, y los resultados son siempre beneficiosos con algo de tiempo y esfuerzo.

Siempre recuerde que es importante intentar divertirte mientras realizas estos ejercicios. Ajústalos a tus horarios; aprende qué te gusta y, si puedes, involucra a tu pareja.

Para obtener resultados mejores y más rápidos, deberías ejercitar todos los días. Los músculos no ganarán fuerza de la noche a la mañana, pero si te mantienes apegado a la rutina, puedes comenzar a sentir cambios en aproximadamente tres semanas.

En busca del músculo pubocoxígeo

El músculo pubocoxígeo es aquél que contraes cuando tienes ganas de hacer lo primero e intentas aguantar hasta encontrar un baño.

La próxima vez que te estés orinando, intenta detener la micción sin usar los dedos simplemente para saber de qué estamos hablando. Ten en cuenta que los ejercicios de Kegel no suelen practicarse mientras estás orinando.

¿Dónde ejercitar?

Ahora que te has decidido a practicar los ejercicios de Kegel, lo primero que debes hacer es encontrar un lugar donde llevarlos a cabo.

Lo bueno de todo esto es que los ejercicios de Kegel pueden practicarse en cualquier lugar y momento mientras te encuentres sentado.

Dado que nunca sudarás una gota ni vas a cansarte de hacerlos, puedes ejercitar incluso durante una reunión de negocios. Intenta encontrar un tiempo y un lugar que te sean convenientes, ya que te resultará más sencillo comprometerte con el ejercicio si lo haces parte de tu rutina diaria.

Los beneficios de los ejercicios de Kegel

Para las mujeres:

• Mayor facilidad para llegar al clímax.
• Orgasmos más intensos.
• Sensibilidad incrementada en la vagina, mejorando la sensación de satisfacción sexual.
• Menos riesgos de incontinencia.
• Alumbramientos más fáciles y recuperación más veloz de los músculos vaginales luego del parto.
• Mejor sexo para tu pareja sexual al ejercer mayor presión sobre el pene.

Para los hombres:

• Erecciones más fuertes.
• Orgasmos más intensos.
• Mayor poder de eyaculación.
• Menores riesgos de impotencia.

Ejercicios de Kegel, paso a paso


El ejercicio básico

Contrae el músculo PC.
Mantén la contracción durante 10 segundos.
Relaja.
Repite tantas veces como quieras (intenta, al menos, hacer 10 series).
Repite varias veces al día, todos los días.

Las variables de este ejercicio

La variables posibles serán incrementar las series, o la intensidad incluso esto dependiendo de la capacidad de cada individuo.

El ejercicio adecuado

Como con cualquier otra forma de ejercicio, deberías asegurarte de hacerlos en forma apropiada, aislando los músculos indicados para conseguir los mejores y más rápidos resultados. Mientras realices los ejercicios de Kegel, no debes contraer las nalgas, los abdominales, ni los músculos superiores de las piernas. El único músculo que se debe contraer es el músculo pubocoxígeo. Si sientes que tu ano se tensiona al ejercitar, no te preocupes; en un principio puede ser difícil contraer el PC y el ano en forma separada. Con el tiempo, deberías ser capaz de contraer en músculo PC en forma aislada.

Si te vienen dolores de cabeza mientras ejercitas, esto podría estar indicando que estás tensionando los músculos del pecho o, tal vez, conteniendo la respiración. En consecuencia, asegúrate de respirar profunda y lentamente. Si los ejercicios te resultan agotadores o si te dan dolores de espalda o de estómago una vez finalizada la rutina, entonces posiblemente: lo estás haciendo demasiado fuerte o estás usando los músculos del estómago. Si sientes cualquier clase de dolor, programa un encuentro con tu médico para esclarecer las dudas. Los Dolores son indicadores de que los ejercicios no son bien realizados. Un doctor calificado será capaz de corregirte o, al menos, descubrir si hay algo mal.

Los ejercicios de Kegel y el embarazo

A las mujeres embarazadas se les recomienda realizar ejercicios Kegel ya que los mismos fortalecen los músculos de su zona pélvica y facilitan el trabajo de parto; específicamente permiten que la acción de pujar se vuelva más sencilla. Además, estos ejercicios pueden llegar a disminuir sus probabilidades de sufrir desgarros durante el trabajo de parto. Durante el período de postparto, realizar ejercicios Kegel podría ayudarla a recuperarse de una episiotomía, así como también podrían ayudarla a evitar la incontinencia postparto y contribuirían a tonificar los músculos de su vagina; permitiéndole disfrutar más de las relaciones sexuales.

jueves, 1 de octubre de 2009

Sexualidad Tántrica I

Amar con control

El modo occidental de la relación sexual entre un hombre y una mujer es más bien machista, especialmente en las sociedades latinas. ¿Por qué? En principio porque toda nuestra cultura está teñida de un cierto machismo o privilegio del varón, el cual se expresa en la mayoría de las actividades: económicas, políticas, laborales, etc. Particularmente, en las relaciones sexuales, muchas parejas padecen el yugo masculino de la urgencia por la eyaculación. El hombre busca saciar su necesidad y cree que ésta se completa en ese efímero momento de la emisión del semen, el cual va acompañado de una serie de concomitantes físicos y neurológicos a los cuales se conoce como orgasmo.

Éste es definido como la culminación del placer sexual y, en ese sentido, el hombre asocia la plenitud de su sexualidad con esa descarga. Pero orgasmo también significa "exaltación de la vitalidad de un órgano", según el Diccionario de la Real Academia Española. ¿Puede hablarse de tal exaltación cuando el hombre no puede poner una pizca de control sobre esa función, a costa de la insatisfacción de su pareja y a la larga, de la suya propia?



La visión tántrica es muy diferente. Sabiamente, encuentra la plenitud del placer en el dominio de la eyaculación. Propicia relaciones prolongadas, en que la mujer pueda alcanzar tantos orgasmos como desee. Y, cuando finalmente el hombre decide eyacular, su orgasmo no resulta efímero sino que está potenciado por una gran estimulación previa.

Sexo, mente y respiración



"El hombre domina su eyaculación -dice Ricardo Daulah- cuando logra hacer desaparecer de su mente la ansiedad por obtener sexo rápido y fácil con tal de «desahogar» su instinto sexual. Esto se consigue concibiendo a la mujer no como un «recipiente» sexual sino como una diosa simbólica y terrena... como una Energía poderosa a la que hay que dar lo que desea..." (1)

Para miles de hombres que hoy sufren una de las más frecuentes disfunciones sexuales, la eyaculación precoz
, esto puede parecer una utopía. Pero para la siempre vigente ciencia y práctica tántrica el control no sólo es posible, sino indispensable para el crecimiento individual y de pareja. El tantrik sabe que en su ser coexisten funciones inferiores y superiores, que cuando están subordinadas unas a las otras hablan de una evolución superior. Así, el instinto sexual (representado por la urgencia de la eyaculación) está subordinado al control de la mente y ésta, a su vez, a los mandatos de la espiritualidad.


"Se hace sexo con espíritu, sexo con alma, cuando se aúnan la mente y la respiración tanto en los preámbulos del coito como en el desarrollo de la relación íntima." (1) Mente y respiración van unidas, se mueven juntas. El dominio de la mente es logrado por técnicas respiratorias. Dominar la respiración es poner control sobre la mente y el semen. Cuando su emisión se controla a voluntad, el hombre se vuelve dueño de sí mismo, y el más apetecible de todos los amantes.

Es posible en occidente?


Tratar de traspolar técnicas tántricas a occidente sin una profunda comprensión de las bases de la cultura y espiritualidad indias es, si no imposible, más bien poco provechoso. Todo en el Tantra está regido por la búsqueda de la unión con El Absoluto. El yogui y la yoguiní, tanto si deciden practicar el maithuna (acto sexual) como si eligen el camino del celibato y la sublimación de la energía sexual, lo hacen con ese objetivo espiritual superior.



"El buscador... debe propiciar en sí mismo el amor consciente, que relevará paulatinamente a toda tendencia de amor mecánico y egoísta. El amor consciente es el resultado de la inteligencia y el discernimiento claro y aprende a poner las causas para que el otro o los otros seres sean felices." (2) De allí las profundas diferencias con la manera individualista y superficial con la que Occidente desarrolla la mayor parte de su sexualidad.


"El amor tántrico y todas las corrientes tántricas de amor se definen como anticonyugales y sobre todo como anticonvencionales. Hay que entender que son actitudes diferentes la de relacionarse con una yoguiní para realizar el maithuna, la de adoptar una mujer como compañera para desarrollar el amor consciente, la de convertir a una mujer platónicamente en la Reina del Mediodía..." (2) Teniendo claros los objetivos, creemos que es posible beneficiarse con nuevos -antiguos en realidad- puntos de vista.

Tomar lo bueno



Queda claro que el Tantra no se reduce a una serie de exóticas posturas para realizar el acto sexual sin aburrimiento. Pero aun sin pretender recorrer ese sagrado camino de búsqueda espiritual a través de la unión sexual y el bhoga (placer), los amantes comunes pueden beneficiarse del sentido profundo que el Tantra otorga al sexo:



• Podrán reformular su actividad sexual, enaltecerla y hacerla más plena y placentera.

• Podrán aprender técnicas respiratorias para poner control sobre la más poderosa de todas las fuerzas de la naturaleza, la cual permite la creación de la vida.


• Podrán establecer nuevos modos de relacionarse desde una perspectiva más pareja, sin privilegios impuestos socialmente, sino en una relación donde cada uno adquiere la importancia que le es propia.


• Podrán revisar avejentados conceptos de masculinidad y femineidad que, por ser temporalmente más nuevos que los ancestrales modelos orientales, no siempre resultan más evolucionados.

Quienes deseen perfeccionarse en la práctica y vivencia de la sexualidad a través de los caminos del Tantra deberán, en fin, cuidarse muy bien de las falsas promesas. Muchos cursos, seminarios y talleres son ofrecidos como una rápida y fácil solución a los problemas de pareja. Buscar y encontrar fuentes fieles e instructores capacitados es esencial para no fracasar en el intento.